Prof. Dr. Marcelo Augusto de Felippes

En Wall Street, frente a la Bolsa de Nueva York, en el centro del distrito financiero de EE. UU., hay una estatua de un toro, que representa el Mercado del Toro (Bull Market en inglés). Por lo que se sabe, desde el siglo XVIII los animales se han utilizado para representar el humor del mercado financiero.

El Bull Market significa un mercado optimista y la expectativa es que los precios de las acciones deberán aumentar, las inversiones tendrán rendimientos y que esta tendencia continuará por algún tiempo. El ataque de un toro es de abajo hacia arriba.

Por otro lado, el Mercado del Oso (Bear Market, en inglés) significa lo contrario de toro. El oso ataca de arriba hacia abajo: sus patadas caen. Además, los osos hibernan: se enfrentan al duro invierno, la temporada de baja productividad, lo que en la sociedad representa una alta inflación, un alto desempleo, una caída del PIB o un segmento del mercado en una determinada época, etc.

Sin lugar a dudas, vivimos en un Mercado del Oso y muchas opiniones han confundido a la sociedad y al mercado financiero.

La confusión de conceptos y entendimientos, hasta entonces consolidados en el estudio de la logística, se han convertido en el centro de las discusiones y en fuertes herramientas de desinformación. En logística, siguiendo la metodología académica, estudiamos lo siguiente:

  • Distanciamiento social: implica evitar estar en grupos grandes. Si necesitas estar cerca de las personas, permanezca a unos 2 metros de distancia cuando posible.
  • Aislamiento: se utiliza para separar a las personas enfermas que tienen una enfermedad contagiosa de las que están sanas.
  • Cuarentena: se utiliza para separar y restringir el movimiento de personas sanas que pueden haber estado expuestas a una enfermedad contagiosa para verificar si se han enfermado. Estas personas pueden haber estado expuestas a una enfermedad y no lo saben, o pueden tener la enfermedad, y no tener síntomas.
  • Toque de queda: implica la prohibición de moverse libremente en las calles y permanecer en lugares públicos. Es una limitación o restricción legal de la libertad de circulación en situaciones excepcionales.

Hasta la fecha, el término Aislamiento Social no existe en la logística, pero la sociología lo entiende como un fenómeno sociocultural que denota la falta de interacción social, es decir, la ausencia de contacto entre los individuos. En este caso, las personas dejan de participar en diversas actividades en la sociedad, un fenómeno que puede ser generado por la exclusión social.

Los medios comenzaron a utilizar el término aislamiento social para la cuarentena o el distanciamiento social. Más tarde agregó los términos aislamiento social horizontal y vertical. De hecho, no hay una definición universalmente acepta de lo que leemos, vemos y escuchamos hoy en las redes sociales, radio y televisión, catalizando un verdadero Mercado de Oso de la comunicación.

La situación se agrava cuando los expertos en materia de salud explican o exponen sus comentarios seguidos de opiniones de periodistas o pseudos comunicadores con malas interpretaciones y sin el verdadero objetivo de informar a la sociedad, politizando un tema que debería ser puramente técnico.

Estamos en el mismo mar bajo la misma tormenta, pero ya no en el mismo barco… la sociedad se embarca en un barco diferente de muchos políticos, muchos medios, muchos desinformadores y productores de noticias falsas.

Cuando aprendí el alfabeto árabe, pronto me encontré con varios proverbios. Muchos todavía me acompañan en mi transcurso y hay uno que es muy propicio para el momento de COVID-19 es: “los perros ladran, las caravanas pasan”. Proviene de una expresión árabe popular que significa consejo, lo mismo que decir “no escuches lo que otros dicen y sigue adelante”.

Es muy importante estar bien informado de las noticias, pero definitivamente debemos evitar opiniones. No recuerdo haber vivido un momento semejante. Separar las noticias de las opiniones se ha convertido en una cuestión de supervivencia social, pues estamos siendo víctimas de ataques de arriba hacia abajo, típicos de un oso.

Prof. Dr. Marcelo Felippes es un cientista logístico, director de la Cámara Internacional de la Industria de Transportes – CIT y “senior fellow” de la Global Federation of Competetiviness Councils – GFCC – EE. UU. (Siga su Blog), dedicó casi 40 años a la logística militar y 2 décadas a la enseñanza del transporte y logística en Brasil, EE.UU., América Latina, Europa y otros países, además de las principales operaciones de logística militar en el Amazonas y el transporte en los Juegos Militares Mundiales – JMM, en 2011, que le valió el título de LOGÍSTICO DEL AÑO. Escribió numerosos artículos técnicos publicados en Brasil y en el exterior y 12 libros sobre logística y transporte. En este artículo, advierte sobre el peligro de una mala comunicación.